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¿Es posible ser feliz cuando el cáncer aparece en tu vida?

Última modificación
Mar , 19/03/2019 - 04:40

 

Me llamo Selene, soy Trabajadora Social experta en Educación Socioemocional y Coach profesional.

Hace un tiempo se me presentó una crisis vital de esas que, por suerte, se presentan pocas veces. Me diagnosticaron un cáncer y después del shock inicial, me dije a mi misma y al mundo: yo no quiero dramas, yo quiero seguir siendo feliz. Con cáncer pero feliz. Y gracias a mi manera de ser, mi formación previa y el apoyo que tuve a mi alrededor, lo conseguí. Conseguí pasar todo el proceso sin dejar de ser feliz. Paradójicamente pasar por un cáncer me enseñó mucho acerca de mí misma en general y de mi felicidad en particular.

Una vez superada la enfermedad, decidí que todo lo vivido, lo bueno y lo malo, las experiencias, sólo tendría sentido para mí si lo ponía al servicio de otras personas que puedan estar pasando por situaciones vitales similares. Y así, nació Copiloto Emocional.

Nace de la detección de la necesidad de acompañamiento psicosocial individual y grupal, de desarrollar el aprendizaje en gestión emocional para transitar por las crisis vitales de una forma más positiva de pacientes, expacientes, familiares y personas cuidadoras. Las personas afectadas por cáncer podemos necesitar apoyo en ciertos momentos delicados del proceso de la enfermedad, en muchos casos olvidados, como reforzar las relaciones familiares en la nueva realidad, ayuda a reajustar los cambios de roles en la organización familiar, acompañamiento en la vuelta a la realidad después de superar la enfermedad, etc.

Y todo esto lo llevamos a cabo tomando como punto de partida los principios básicos del Trabajo Social de empoderamiento de la persona mediante la liberación de sus capacidades intrínsecas, su creatividad y la estimulación para trabajar en el logro de sus objetivos para su pleno desarrollo.

¿Cuál es nuestra visión?

En tiempos en los que luchar contra el cáncer como forma de afrontamiento está de moda. En el que impera el lenguaje bélico. En que los mensajes que se escuchan son del estilo: ahora tienes que estar fuerte, si se te ve tan bien… y, a la vez, tiene un cariz sensacionalista y superficial. Queremos aprender que otra forma de comunicarnos con nosotros mismos y nuestra enfermedad es posible. Una forma más amable, más cercana y ¿por qué no? incluso más divertida.

Queremos poner de manifiesto que no es viable pretender estar siempre fuerte cuando tenemos cáncer, estamos en tratamiento quimioterápico… si ni siquiera conseguimos estar siempre fuertes cuando estamos sanos. Que no hay ningún sentimiento de culpabilidad ni nada malo en llorar cuando se tienen ganas o en enfadarnos. Igual que tampoco lo hay en reír si es lo que te apetece o celebrar cada día como si pudiese ser el último, aunque se tenga cáncer.

Que aunque tenemos cáncer, o lo tiene mi marido, o lo tiene mi hija, somos libres. Libres para decidir cómo lo queremos transitar. Cómo lo queremos vivir. Cuánto de nuestro tiempo queremos darle al cáncer y cuánto de nuestro tiempo queremos vivir sin prestarle atención. Que nadie nos puede decir cómo vivir nuestro proceso, porque es nuestro. Que el discurso imperante es uno e igualitario para todas las personas enfermas pero que cada proceso es diferente, cada persona única y que se puede vivir un cáncer de miles de formas diferentes. Y lo más importante, que todas y cada una de ellas son correctas.

¿Qué acciones vamos a emprender durante el programa MIE?

Partiendo de la metodología de intervención del Trabajo Social más comunitario vamos a poner en marcha Círculos de cuidados para pacientes, expacientes, familiares y personas cuidadoras. Ofreciendo un espacio para compartir, de aprendizaje común, de crecimiento. Un espacio donde llorar y donde reír.

Nos reuniremos de manera quincenal siendo posible elegir la asistencia en horario de mañana o de tarde. Si te apetece participar llámanos.

Dentro del programa MIE voy a realizar una serie de eventos enfocados a transmitir maneras diferentes de vivir la experiencia vital que supone un diagnóstico como el cáncer y su proceso. Contaremos con distintas personas que han transitado un camino parecido y, en cambio, su manera fue diferente. Para realizar después un coloquio entre todos los asistentes (pacientes, expacientes, familiares y cuidadores además de profesionales de la salud y asociaciones).

El primero de ellos ya tiene fecha 28 de marzo de 17 a 19 en La Plaza de Zaragoza Activa. Hablaremos de Cáncer y felicidad ¿es posible?. Contaremos con la participación de profesionales del sector médico, con asociaciones y personas para las que de una u otra forma el cáncer forma parte de sus vidas. ¡Vente! >> Inscripción